Micaela nació en Estados Unidos. Sus padres, peruanos, se conocieron en ese país cuando estudiaban en la universidad. La familia regresó al Perú y luego de vivir en Trujillo y Lima, decidieron emigrar definitivamente. Micaela tenía seis años. Hoy, con 24, divide su tiempo entre el marketing, su familia y el deporte: es atleta.
Empezó a correr a los 15 años, fue capitana de la Utah State University y compitió con éxito en diversos torneos universitarios. Siguió corriendo y ganando, ahora de la mano de su esposo y entrenador, Adam Wood. Le faltaba algo: la conexión con el Perú. Micaela es bisnieta de Luis Galvez Chipoco, primer peruano campeón sudamericano de atletismo.
Se unió al Club Regatas Lima y en abril de este año se proclamó campeona nacional de 5,000 y 10,000 metros planos. Fue convocada a la selección y en mayo, en su primera competencia representando al Perú, ganó la medalla de plata en los 5,000 metros planos del XX Campeonato Iberoamericano de Atletismo, realizado en Cuiabá, Brasil, con un tiempo de 16:14:56. Ahora va por el récord nacional de Inés Melchor (15:30.63).
Dicen que los genes cargan el arma y los hábitos tiran del gatillo. A Micaela le nació elegir al Perú y ahí va, disparada en su imparable ascenso a la gloria.