Aventura

AUSANGATE CONQUISTANDO EL CIELO

Ausangate (en quechua: Awsanqati) es la montaña más alta del departamento del Cusco y la quinta más alta del Perú. Su altitud máxima es de 6,385 m.s.n.m. Está situada a unos 100 kilómetros al sudeste de la ciudad imperial, en la cordillera de los Andes, en un tramo denominado cordillera de Vilcanota.

En la mitología inca de esta montaña y de los lagos cercanos -entre los que se destaca Sibinacocha- nace la energía masculina que fertiliza a la madre tierra Pachamama. Luego de un largo discurrir, las aguas se pierden en las tierras ignotas del Amazonas para retornar a llenar los lagos y los glaciares cada noche convertida en el río de estrellas o Willkamayu, conocida en occidente como la Vía Láctea.

La comunidad de Chillca, constituida por pastores de llamas y alpacas, es conocida como la guardiana de estos prístinos parajes desde donde se puede hacer caminatas de montaña, pasando la noche en cómodos albergues o tambos.

EL RECORRIDO:

Muchos me preguntan sobre esta maravilla. Pues bien, enseguida, en PerúDeportes, les contaré cómo podemos disfrutar  juntos de varios días extraordinarios que valen la pena vivir. Lo primero que  tenemos que hacer es aclimatarnos a la altura tres días antes de iniciar el recorrido; esto lo podemos hacer en Cusco ciudad o en el Valle Sagrado. ¡Así iniciamos!

DE CUSCO A UPIS. El primer día saldremos de Cusco o del Valle Sagrado en nuestro transporte privado para trasladarnos al inicio de la caminata. Iremos hacia el sur hasta tomar el desvío a Puerto Maldonado.

Luego vamos a Cattca,  una  comunidad de pastores agricultores desde donde podemos apreciar una vista hermosa de toda la región, hasta llegar a Ocongate, capital del distrito que lleva el mismo nombre. Pasaremos por el poblado de Tinki y continuaremos un poco más allá para empezar a caminar. Lo haremos en subida por alrededor de dos horas, con una hermosa vista al Ausangate hasta nuestro primer campamento en Upis (4,200 m.s.n.m.) donde hay baños termales. Ahí acamparemos con una vista extraordinaria para recuperar la energía y, claro está, las fotos respectivas para el  recuerdo.
¡Infaltable!

DE Q’AMPA A NINAPARAYOC. 

Ya llegado el cuarto día, caminaremos en la mañana por una subida con vistas espectaculares y llegaremos al paso Q’ampa (5,100 m.s.n.m). Con suerte, en este tramo podremos ver al venado andino. Continuaremos descendiendo a Ninaparayoc, donde acamparemos rodeados de lagunas.

DE  Q’AMPA  A  PACCHANTA.

  En  nuestro quinto y último día de aventura, caminaremos alrededor de dos horas de bajada hasta Pacchanta, donde también hay baños termales. Ahí nos esperará nuestro trans- porte que nos llevará de regreso a Cusco o el Valle Sagrado. ¿Qué tal esta experiencia?

¡Es momento de vivirla!

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